¿CÓMO SE HACE?

30 de julio de 2014

José Larralde - Y Un Porqué Sin Final (1975)


"A esto respondo yo que las objeciones que haces pueden volverse también contra ti, en su mayor parte, y que no proceden de ti sino de mí. Ni siquiera tu desconfianza por los demás es tan grande como mi desconfianza por mí mismo, en la que me has educado. Y no te niego hasta un cierto derecho a esa objeción, que además contribuye por sí sola a la caracterización de nuestras relaciones. Claro está que las cosas no pueden ajustarse en la realidad tan bien la una con la otra como los argumentos en mi carta, porque la vida es algo más que un rompecabezas; pero, gracias a las enmiendas que surgen de esta confesión, y que no puedo ni quiero extender hasta el detalle, se ha logrado, a mi parecer, algo tan próximo a la verdad, que podrá tranquilizarnos un poco a los dos y hacernos más fáciles la vida y la muerte."

                       Franz Kafka. "Carta al Padre" (noviembre de 1919)

"Tu alma puebla los desiertos,
y del Sud en la campaña
al lado de una cabaña
se eleva fúnebre cruz;
esa cruz, bajo de un tala
solitario, abandonado,
es un simbolo venerado
en los campos del Tuyú."

Bartolomé Mitre, "Santos Vega", en Rimas

Una patraña sobre una vuelta: Cuenta la historia que venía el linyera llenándose los pies de tierra por algún camino de campo, en la búsqueda de algún árbol para guarecerse del sol que calcinaba la llanura al mediodía. A lo lejos, divisa con su ojo adiestrado en el llano un oasis de hojas y sombra. “Un sauce”, piensa, y apura el paso como si fuera la última vez que vaya a disfrutar de una sombra “comodio’manda”. Al estar a unos pocos metros del reparo salvador (que resultó ser un Tala) nota que ya hay alguien allí apostado. Y cosa extraña: está tocando una zamba conocida y con mucha maestría. Lo extraño no era la zamba (porque era conocida) si no que estuviera tocando la guitarra y tan bien, sea quien sea, a esas horas del mediodía con un calor que rajaba la tierra. “Ave maría purísima”, ensaya gritar, pero le sale un graznido digno de un carancho. “Sin pecado concebida”, se escucha desde la sombra del tala. Por más que quiera y cogotee, el linyera no le alcanza a ver la cara del que está bajo el árbol. Ya más cerca, lo ve y casi sale corriendo, casi. No es que era tan feo, pero sí bastante feo. “Más que feo, raro, como si no le pudiera adivinar bien la cara”, piensa nuestro linyera, muy concienzudamente. “Puta, me insolé seguro”, cranea a continuación. “Buenas y santas”, ensaya con un poco más de entusiasmo. “Buenas, aparcero”, dice el “sin cara”, “pase y acomódese donde guste”, remata. Acto seguido, el linyera hace lo propio, se desparrama en el suelo y agradece a su compañero de árbol la buena atención. La cosa no pasaría a mayores si no fuera porque el linyera en su afán de abrir el diálogo pregunta el nombre del “sin cara”. “Juan sin ropa”, le contesta el “sin cara”. “No se aflija, compañero, usted no se acuerda de mí, pero nosotros ya nos conocemos”. Atónito es lo mínimo que se puede decir de la expresión de nuestro linyera, era la cara misma de la incredulidad. “Usted se equivoca, me temo, aparcero, yo no lo ví  en mi triste existencia a su persona”, dice el linyera. “Pero claro, que no se acuerda, Santos, yo mismo le di la ventaja de la desmemoria”. “¿Santos?”, pregunta, interroga, ensaya nuevamente con un hilo de voz, el linyera. “Sí, usted era Santos Vega, el payador invencible, a quién derroté en duelo singular de payada hace ya unas cuantas leguas de camino y muchos años más”. El linyera, quien efectivamente no recordaba ni siquiera su nombre, solo el ir y venir por el campo, esquivando poblados grandes, solo acercándose a los más chicos para hacer una changa y conseguir algo de comida, tuvo un solo sentimiento, para ser exactos una sola sensación en ese día de calor extremo en el campo bonaerense, sintió como se le erizaban los pelos de la nunca en un escalofrío que le llegó a helar la sangre, y ahí algo se acordó: “es como si hubiera visto al mismísimo diablo”.

Mirá la que te traigo, che!!!... Y al cuarto día despertó entre los incrédulos… Ejem, sean UDs. Bienvenidos a este eclecticismo sin par, a este vaivén de estilos, a este devenir contante de proezas dignas del equilibrista del circo más rasca, al humilde sitio que peca de melómano y sin embargo nunca expía sus culpas, sean UDs., Bienvenidos y sin más dilaciones al blog loco que hemos dado en llamar (J.P. Sastre y quien escribe)… Sacudiendo la colina… Telúrica.
Venimos de puro rock sureño (del norte) ahora pasamos a mirarnos el ombligo nacional… la cosa es así, como a mí me gusta el rock (jazz, blues, metal, etc), a mi viejo le gustaba el folklore; cualquier folklore no, el folklore sureño, el de los cantores sureños, esos que cantan solitos y solos con la guitarra y dan más pena que un pajarito muerto. Son esos tipos que abundan a montones al sur de la provincia de Buenos Aires y son marca registrada por esos lares. Para quien no lo conoce José Larralde es como un tío severo (el tipo te va decir que su carácter es “podrido”) que sabe tocar y cantar como pocos (oriundo de Huangelén, partido de Coronel Suárez, Pcia. de Buenos Aires), de esos que si no hacés silencio cuando toca, se pudre todo, te reta (además de hacerte pasar un momento incómodo) y es capaz de irse. Este gaucho cabrón (es con cariño, che) tiene más discos que los muchas bandas de rock, una historia digna de contar (que incluye a Jorge Cafrune, entre otros) un voz (tan poderosa, pero tan poderosa) que te paraliza en su potencia y unas letras que reflexionan desde cuestiones metafísicas hasta cuestiones referidas al mate o al cigarrillo, todas de muy buenas a geniales. Ahora, por qué se me da por postear un disco de folklore, bueh, como les decía, por mi viejo. Él fue quien me dijo alguna vez, “escuchá esto y vás a ver lo que es un cantor y no esas latas que escuchás vos” (casi literal, sin exagerar y seguramente a más de uno le pasó). Y lo hice, es más, este disco se lo regalé y por esas cosas de la vida, volvió a quien escribe. Y acá está, para que le entren con ganas y gusto. Si quieren conocer al cantor acá les dejo una de las pocas entrevistas que ha concedido el aludido (porque Larralde no da entrevistas, casi que no hace falta aclararlo; créditos al entrevistador, muy interesante por cierto), pueden estar de acuerdo, o no, pero no podrán negar que tiene voz propia (y unas cuantas “verdades” dirán los exégetas). En fin, el disco es una muestra acabada de lo que es capaz Larralde; hasta la tapa tiene algo muy paisaje bonaerense (una flor de cardo, carajo), arranca con un poema “Elogio de la soledad”, tema recurrente del gaucho bonaerense, pero no por eso menos genial (temazo se podría decir), arranca diciendo: “en la barra de un bar”!!!... (Y dice también: “todos estamos solos, juntos o aparte de los demás”). Continúa con una milonga (Milonga de gurí) que si no le encuentran “onda” o un sentido puramente campero (muy campero, muy), están escuchando otro disco; pasa por recitados, valcecitos y otros poemas y llega convencerte de ida y vuelta.
“Que triste que es cantarle al viento cuando hay que cantarle al hombre, menos mal que el viento sabe demasiado pa’ que se asombre…” (Sobre la cruz del olvido). Esas cosas te podés cruzar mientras transitas el disco. Seguramente les parecerá difícil si no estás acostumbrado al estilo, puede que digan “esto no es para mí” y puede que tengan razón (aunque si lo pensáis un poco nomás, Larralde tiene más rock que muchas bandas que así se autobautizan, hasta metal diría, pero me gritarán exagerado y hereje, y tendrán razón). Pero, y acá es cuando me caliento, no me vengan con el “poeta” ese de Guatemala luego de escuchar “Si tu lloras de pena”, no me vengan eh!!!. Y pa’ cerrar, nada mejor que un tema bien arpegiado, “Noche y camino”, para los nocturnos-nostálgicos-enamorados-y-caminantes. Sin más, me retiro por donde vine, les dejo esta cosita que me vino por pura enseñanza paterna (y siempre agradeceré), les dejo nada más y nada menos, que ninguna respuesta, solo un porqué sin final.

Tracks:

01. Elogio de la Soledad - 05:16   
02. Milonga (De Guri) - 03:06
03. De la Tarde Final - 02:18
04. Sin Despues - 03:15
05. Como Dos Rejas - 02:10   
06. Pa' la Cinchada - 03:14   
07. El Tamayo - 03:22           
08. Sobre la Cruz del Olvido - 05:06           
09. Si Tu Lloras de Pena - 02:34        
10. Bajo Este Cielo - 02:08   
11. Trabanco - 04:15   
12. Noche y Camino - 04:35

Compresión: CBR 320 Kbps
Tamaño: 88,6 MB
Pass: somospacifistas
Lo filmaron si que sepa (si no se arma, je): José Larralde en vivo (recital completo)

Opción 1

Opción 2

26 de julio de 2014

Gov't Mule - Gov't Mule (1995)


"Hasta el fin", dije temblorosamente. "Oí sus últimas palabras...". Me detuve lleno de espanto.
-"Repítalas", murmuró con un tono desconsolado. "Quiero... algo... algo... para poder vivir."
-"Estaba a punto de gritarle: "¿No las oye usted?". La oscuridad las repetía en un susurro que parecía aumentar amenzadoramente como el primer silbido de un viento creciente. "¡Ah, el horror! ¡El horror!.

                         Joseph Conrad. "El corazón de las tinieblas".

Descargo de un científico idealista y cabrón (anotaciones encontradas en un cuaderno de notas en algún lugar del conurbano bonaerense) - Primera Parte:
                                      "Pero qué poca inteligencia le damos a nuestros ancestros, a los que vivieron antes que nosotros, a los antiguos. Claro, como vivieron en un mundo no informatizado, nos consideramos el punto culminante la evolución en los saberes. Nunca se supo más que ahora, nos repetimos como un mantra para convencernos de nuestra sapiencia y así poder vivir. Piensen por un momento todo lo que perdimos con el incendio de la Biblioteca de Alejandría, imaginen. La velocidad nos hizo arrogantes y allí radica el síntoma de nuestro tiempo. Con la velocidad vino la obsolescencia  programada y vino un mundo que se vence mientras estas leyendo estas líneas. Los antiguos supieron algunas cosas que quizás nunca imaginemos. Claro que más fácil y tranquilizador es pensar: no, no pudieron hacerlo, porque la ciencia actual no puede hacerlo. Pero nos olvidamos de algo: la verdad científica es momentánea, es casi un espejismo, es históricamente provisoria. Entonces: NO, repito, NO es lógico pensar que porque la ciencia no puede realizar tal o cual experimento o viva experimentando y llegue a callejos sin salida, nadie lo puede hacer. Tranquilamente podemos pensar que esa verdad que hace andar o permite realizar cual o tal proeza técnica no es asequible hoy por la ciencia, pero sí lo fue por alguna sociedad pasada. Las premisas científicas son perfectibles, siempre podemos desarrollar un método mejor, experimentar más acertadamente, y así; pero la verdad (científica) siempre es provisoria. ¿Y si una de esas verdades provisorias fue alcanzada antes de nuestro tiempo y luego desaparecida junto a la civilización que la alcanzó?. No, no podemos pensar así, dirá alguno, porque nos haría menos geniales de los que nos creemos. Por ello, no se lo endilgamos a la ciencia (porque esta es amoral) y no puede explicar lo que no sabe, pero sí le buscamos una explicación, una mágica, increíble, no lógica; la más común: es obra de los extraterrestres (llámenseles como gusten: aliens, ETs, Annukakis, reptilianos, etc). Esa, además de ser la raíz de todas las conspiraciones, es el tema principal para explicar todo lo que no puede la ciencia (pero sí los Dioses, claro está). Muchachos, la Iglesia Católica acepta la Teoría de la Evolución, no es joda, con unos agregados que sirven a la institución, comprensiblemente. Ok, ataquemos la Teoría de la Evolución entonces, pregonan los amantes de lo extraterreno; pero ellos no quieren entender que “teoría” en ciencia no es un conjunto de frases dichas al azar y unidas por el relato de alguien. ¿Que la Teoría de la Evolución tiene lagunas?, pero claro que tienes lagunas, ningún estudio de tal magnitud fue terminado de una día para otro. Y así  seguimos, nos peleamos con el conocimiento científico y nos abrazamos con la desinformación veloz e increíble de todos los días. Y nos llenamos la cabeza de pavadas, y peor aún, las repetimos a otros, las reproducimos en todos los formatos que en la coyuntura existen para así llegar a todos y más lejos aún".
Nota: continuará...

Say yes!! Excesos, Excesos!!!... ejem… Sean uds bienvenido una vez más a esta locura conceptual que hemos (me and J.P Sastre) dado en llamar… Sacudiendo la Colina!... sureña.
A un servidor no le gusta irse, pero sí le gusta regresar y más si para esta ocasión procuré revolver en el arcón de los recuerdos (para el aniversario del bloguito!!), es decir, me puse a escuchar discos (no tan) viejos y rescaté cosas (para un servidor tan) geniales como para dejar por aquí. La primera viene por partida doble, dos discos dos.  Gov’t Mule es el apócope de Government Mule, una banda que nace por el parate discográfico de otra (The Allman Brothers band). Por ellos, tenemos esta maravilla sureña, rockera, blusera y jammera (¿?) que es la Mula… del gobierno. Los artífices de esta gran banda fueron Warren Haynes y Allen Woody, y sumaron al baterista Matt Abts y al bajista Andy Hess para darle forma a Gov’t Mule. El fallecimiento de Woody, dejó a Haynes (el que diga: ¿quién?, bueh, la revista de canto rodado le dio el puesto nro. 23 entre los 100 mejores guitarristas de all times, ¿es poco?, no jodan) al mando del asunto. Pero acá traemos la primera etapa de la banda, y exactamente el primer disco de estudio, el hómonimo, el que sacaron porque los hermanitos Allman no trabajaban en ningún material nuevo (o el momento en el cual estos muchachos tenían unas ganas bárbaras de tocar y grabar algo). Fue en 1995 cuando plasmaron en el estudio, tocando en vivo el disco (un tema grabado tras otro), este ejercicio de cómo hacer un jam, una improvisación de rock-blues sureño y que suene como canciones, tenga onda, sea fiel al estilo y además “sea rock”. Todo mérito de Haynes y compañía. No es menor el dato de que Haynes se haya unido a los Allman bros, el tipo sabe cantar y tocar la guitarra como dicta la escuela austral (“del norte”) del blues. Y cuando se le da por pasar por el rock te deja moviendo la patita con dos notas y un verso haciendo juego.
Arranca la intro y ya sabemos que esto será “en tu cara”, nada de medias tintas o hacerse el otario. Esto es música con una tradición enorme y puede que a cualquiera el sayo no le quepa. Estos tipos no se sonrojan y te dejan con la boca abierta, “Rocking Horse” es una declaración de principios estilísticos, mucho blues-rock, improvisaciones copadas, solos de antología y la garganta de Haynes poseída. Se podría describir el primer disco de Gov’t Mule con los arreglos nomás, son gloriosos. De esa forma, no decís nada y abrís un gran interrogante. Pero realmente los arreglos son grandiosos, gloriosos, es como que los escuchaste antes, los conocés, los tenés internalizados, son parte de tu historia musical, sin embargo, los escuchás en “La” mula y lo primero que pensás es: cómo carajo les quedan tan bien a estos tipos. Hagan la prueba y luego me cuentan. Piensen si esos yeites, esos arreglos no los escucharon antes y luego piensen si en otra banda serían una porquería repetitiva. Eso se llama, pura y llanamente, oficio. Sinceramente, cada vez que escucho este disco, no dejo de maravillarme con las cosas que le encuentro. En estas últimas escuchas me obsesioné con “Trane”. Es música en consonancia con el entorno, no puedo creer lo que hacen estos tipos cuando se cuelgan a zapar, es una maravilla de la naturaleza. Ahora, si querés “onda”, lo que se dice “cool”, pasate por “Mule” y luego me contás. En fin, no los atosigo más, sigan haciendo lo que estaban haciendo, denle una escuchadita a Gov’t Mule y se encontrarán con algo que no podrán dejar. Dedico este post (con “Painted Silver Light” y “Mr. Big” de fondo) a unos tipos que son parte de algo más grande que cualquier cosa: String, Tex Tex, Mr. Tank, Le Chief y el Enorrrmmee… J.P. Sastre… Por amistad y, como siempre decimos robándole al uruguayo, Gracias por el fuego.

Tracks:

01. Grinnin' in Your Face - 01:35
02. Mother Earth - 08:13
03. Rocking Horse - 04:06
04. Monkey Hill - 04:40
05. Temporary Saint - 05:44
06. Trane - 07:28
07. Mule - 05:39
08. Dolphineus - 02:03
09. Painted Silver Light - 07:07
10. Mr. Big - 06:06
11. Left Coast Groovies - 06:52
12. World of Difference - 10:15

Compresión: CBR 320 Kbps
Tamaño: 152 MB
Pass: somospacifistas
Una declaración de principios: Gov't Mule - Mule (Live)

Opción 1

Opción 2

Gov't Mule - Dose (1998)


"La voz de Hákim ensayó un engaño final. "Vuestro pecado abominable os prohíbe percibir mi esplendor..." comenzó a decir.
No lo escucharon, y lo atravesaron con lanzas."

Jorge Luis Borges. "El tintorero enmascarado Hákim de Merv" en "Historia universal de la Infamina"

Descargo de un científico idealista y cabrón (anotaciones encontradas en un cuaderno de notas en algún lugar del conurbano bonaerense) - Segunda Parte:
                              "El ejemplo más acabado de todos: las pirámides de Egipto fueron construidas por una inteligencia extraterrestre. Es tan genial esta teoría como absolutamente pelotuda. Porque parte de la premisa: si en la actualidad no la podemos reproducir, menos la pudieron hacer los antiguos egipcios. Es decir, no solo menosprecian el saber de los antiguos, sino que le endilgan a la ciencia la difícil tarea de explicar todo, absolutamente todo; y eso no se puede. Porque si hubiéramos llegado a dominar todo el conocimiento posible, hubiéramos abierto las puertas de la percepción y pudiéramos “ver” realmente lo que  la “cosa es”, estaríamos muertos de aburrimiento (además de haber encontrado un método y una metodologías perfectas para adquirir conocimiento). No se pretende aquí entronizar a la ciencia, si no que se busca dejar al desnudo la inviabilidad de la explicación "alien" (la duda siempre será tal, hasta que sepamos lo contrario, pero la duda o la posibilidad de la duda nunca es una explicación). Es simple, no tienen pruebas (o si “las hay” son de poca veracidad o directamente montajes, truchadas, etc), y si no se pueden evaluar pruebas, serán todas conjeturas en el aire (o mejor, youtubianas o “cósmicas”, o más allá y al infinito, bleh) y por lo tanto, esas conjeturas no se pueden convertir en “teorías científicas” y mucho menos en una verdad alternativa. La ciencia es imperfecta porque no puede explicar todo, pero eso no quiere decir llenar lo que no se puede explicar con... extraterrestres ...ó Dios. A favor de la ciencia está el hecho de la divulgación y la evaluación de los datos entre los científicos (una tarea necesaria y obligatoria entre quienes se dedican a esto) para así comprobar, experimentar, criticar, sopesar (con conocimiento de los métodos y las metodologías usados) si lo que se expone en un trabajo, paper, estudio es veraz, cierto y no es refutable. Obviamente, tampoco se busca idealizar a la ciencia, porque también debería ser desinteresada en sus hallazgos e investigaciones (cosa que muchos científicos, laboratorios y empresas científicas se empeñan en no cumplir). Por todo lo anterior, pensemos, evaluemos, critiquemos, leamos, investiguemos un poco más y no demos explicaciones simplistas; dejemos de restarle mérito a las viejas civilizaciones y busquemos aprehender de ellas; tenemos todo el tiempo que transcurrió, tenemos a la historia (que también es una ciencia, como método científico y todo) como aliada. Tratemos de no repetir errores y evitar las causas de por qué cayeron esas civilizaciones; aprendamos que la ciencia ficción especula (y tiene grandes autores, que cosa extraña no encontramos entre los conspiracionistas, porque creen que lo que dicen es “serio”) y anticipa, pero es literatura, no ciencia. Y por último, si proponen una supuesta “versión de los hechos que nos enseñaron”, háganlo en serio, respetando el saber acumulado durante siglos y no nos traten de ingenuos; es verdad que nos falta mucho por aprender, somos consciente de ello, pero no son ingenuidad (si bien pequen de serlo) la curiosidad, la racionalidad (aunque produzca monstruos) y la imaginación.
Hasta acá el descargo, hasta aquí la diatriba, ya tendrán noticias mías, desde la real experiencia y no desde el espacio exterior".
(Nota de la transcripción: fuentes de allegados cuentan que el investigador en cuestión desapareció sin dejar rastros camino a la ciudad de Bolívar. Su paradero es al día de hoy, desconocido).

Say fuck all!... y ejem… Sean uds Bienvenidos a este mes aniversario que con el amigo J.P Sastre hemos dado en llamar: Sacudiendo la Colina… Sureña 2, the revenge.
Resulta complicado luchar contra muchas cosas a la vez; pero una de las cosas más complicadas debe ser desdoblarse mental/musicalmente para ponerse a escribir un post (que pocos leerán, je) que verse sobre una banda que quizás en el momento que te decís: “estaría copado postear esto, che”, no estabas escuchando precisamente ese estilo musical. Tarea doble la del redactor que tiene que darle a las teclas para dejarles en claro de qué viene la cosa cuando en su cabeza suena otra cosa distinta que está dando vueltas en las neuronas y lo cual es imposible dejar de lado. Sin embargo, acá estamos no para hablar de lo último de tal o cual locura noruega que anda por allí, si no y… Cómo habrán leído (je) en el post de arriba, Gov’t Mule es la banda comandada por Warren Haynes que nos deleita con blues, rock, improvisaciones, todas tamizadas por un aire sureño (del norte) que encandila. Acá tenemos en las manos, el segundo disco, Dose, el que es más cancionero, un poco menos “jam” y que no tiene desperdicio alguno. Desde  el comienzo de “Blind Man in the Dark” ya sabremos lo que nos espera en esta entrega de “La” mula: guitarras al frente, la voz del enorme Warren y un estribillo que se queda clavado en la memoria por un largo tiempo. Y así, luego de ese fuego inicial, continúa Dose con un tema más “reposado” con un bajo que te marca el ritmo y un “in crescendo” que en cualquier momento explota; que solo por dios!!!!; en fin, "Thorazine Shuffle". Y claro, como no quererlos a estos tipos, “Thelonius Beck” es una oda al jam blusero, ortodoxo, aceitado, rítmico, cuadrado, yeitero, instrumental y un largo etc; pero funciona y de manera tan perfecta, que asusta. “Game Face”, se presenta a sí misma con ese bajo aristocrático y esa guitarra que destroza el silencio, con un Haynes arriba, bien arriba y a medio tiempo, una delicia cuando clavan esos arreglos old school, una delicia de canción. Y ahora que me estoy dando cuenta, estoy picando todo el disco. Mejor resalto un par más y los dejo a uds, porque si no es apología. En el resto del disco, hay temas reposados, “baladescos”, oscuros como solo el blues-country puede ofrecer.  De todas maneras, tengo que destacar tres temas más, el primero es “John The Revelator”, una "traditional" que hicieron todos, absolutamente todos, pero en manos de estos tipos, es oro en polvo, por favor… ¡QUE onda, por dios!... El otro tema es “Raven Black Night”, una maravilla casi acústica que se va tejiendo sola, que no deja respiro, que asedia cualquier análisis racional; en serio, díganme que no es una oda al buen gusto, díganme. Por último, tenemos la versión de los cuatro de Liverpool, “She Said, She Said”; muy acertada interpretación de Haynes y cía, que me da pie para dedicarle este post a un tipo que no está más (y eso hace difícil que lo vaya a leer) pero que cuando le pasé este disco, no me lo quería devolver, tardé bastante tiempo en convencerlo de lo contrario (o hasta que se agendó el disco para su colección), lo logré y acá está para que uds lo sopesen, lo escuchen y lo disfruten, porque realmente estos son discos para disfrutar; tipos que saben tocar, haciendo lo que mejor les sale, tocando buena música, sacudiendo atemporalmente la colina… sureña. Un brindis para el bloguito y su aniversario!...

Tracks:

01. Blind Man in the Dark - 06:47
02. Thorazine Shuffle - 06:46
03. Thelonius Beck - 03:33
04. Game Face - 07:55
05. Towering Fool - 06:22
06. Birth of the Mule - 06:41
07. John the Revelator (traditional) - 03:49
08. She Said, She Said (Lennon–McCartney) - 6:57
09. Larger Than Life - 05:13
10. Raven Black Night - 05:29
11. I Shall Return - 05:40

Compresión: CBR 320 Kbps
Tamaño: 147 MB
Pass: somospacifistas
Puff y más puff: Gov't Mule - John The Revelator (Live)

Opción 1

Opción 2